El
microscopio es un instrumento que permite observar objetos que son demasiado
pequeños para ser vistos a simple vista. El tipo más común y el primero
que se inventó es el microscopio óptico. Se trata de un instrumento
óptico que contiene dos o más lentes que permiten obtener una imagen
aumentada del objeto y que funciona por refracción. La
ciencia que investiga los objetos pequeños utilizando este instrumento se llama
microscopía.
La lupa binocular es un
instrumento con un juego de lentes fijo. Se
denomina así por tener dos oculares que
pueden adaptarse a los ojos.
El aumento que proporciona la
lupa es mucho menor que el proporcionado por
el microscopio, pero el campo visual de
trabajo es mucho mayor. Con la lupa podemos
estudiar, de forma muy detallada,
estructuras macroscópicas, por ejemplo,
nuestra propia mano o el moho del pan.
Las lentes, oculares y
objetivo, se encuentran situadas sobre un
soporte que puede desplazarse verticalmente,
gracias al mando de enfoque. De esta forma
podemos enfocar nuestra muestra.